miércoles, diciembre 10
No hay nadie que busque cambiar, la eternidad del cielo, solo por tener algún momento para amarte como yo, no hay nadie que busque entre las sombras el mejor recuerdo, aquel el de tu risa que amenaza con matarme de felicidad. No hay nadie como yo que no se cansa de mirarte, que se muere por tenerte cerca mas que nunca. No hay nadie como yo que no se atrevería a tocarte por temor a equivocarse. Nadie como yo. No hay nadie que diera todo por una caricia tuya, solo por tenerte un contacto con tus manos, como yo no hay nadie que te regale el alma sin pedirte nada. No hay nadie que despierte a media noche pierda el sueño por pensar en ti. No hay nadie como yo, que no se cansa de mirarte, que se muere por tenerte cerca mas que nunca, mas que nunca. No hay nadie como yo que no se atreve a tocarte por temor a equivocarse. Nadie como yo que no vive ya sin verte y no deja de pensar que algún día volverás a abrazarlo fuerte. No me importaría esperarte pues no dejo de soñar que algún día volverás a abrasarme fuerte. No hay nadie como yo, que no se cansa de mirarte, que se muere por tenerte cerca mas que nunca más que nunca. No hay nadie como yo
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